Otoño de domingo lluvioso
jirones de recuerdos rasgan la casa
atravesé las cercas y el olor a ciruelas
me hizo oír muchas risas
había un alboroto en las ramas
los pájaros se alegraban
hasta las maltratadas paredes
se hablaban entre ellas
había mucha tristeza
el agua corría desde mi abrigo a mis botas
el acumulado musgo estrujaba sus ropas
las ventanas pedían contemplar las calas
que nunca duermen
estaban susurrando los versos de mi madre
el olor a té me dejo inquieta
había que ponerles cortinas a los vidrios rotos
seguía lloviendo y los arboles entumecidos
sacudían sus mochilas cargadas de hojas.
Esta fue la casa de otoño donde mi padre encendia la chimenea
hoy esto queda... presencias... recuerdos... y muchas soledades....
LEDESKA
DERECHOS RESERVADOS.
¡cuanta tristeza...! leyendo el poema, supe que iba dedcado a tu padre, antes de leer la dedicatoria. Me ha gustado mucho y he decirte que la foto, por sí sola,transmite toda esa melancolía que desprende tu bello poema
ResponderEliminarUnBeso
Juan Carlos
Se estremecio la casa cuando sintio mis pasos... senti que las paredes lloraban a traves de las cañerias totalmente rotas....
ResponderEliminarLedeska
creaste unas imágenes muy melancólicas.
ResponderEliminarun abrazo
Fue mi casa Reltih.... ahi esta la melancolia ahora y muchos pasados...
ResponderEliminarLedeska
Ledeska, me conmueven estos poemas.
ResponderEliminar¿Sabes que mi padre, al igual que el tuyo, también era fumador? Fumo hasta el último momento, y eso que el tabaco fue la causa de su muerte.
Un beso
la imagen..las palabras..el otoño..y el pasado..se juntan en los versos..que traen tantas similitudes de tiempos que se fueron y nunca volveran..asi dice el tango..todo cubre ese sol cansino inclinado del otoño..que deja ver en su verdadera dimensión..los recuerdos..
ResponderEliminarabrazotes desde el sur