El cielo era gris y las golondrinas dibujaban estelas de adióses danzantes nubes llenas de gotas de lluvias abrazaban los arboles de mi infancia la pobreza se arrastra en la siesta del medio día y los girasoles se mecen en nostalgias sucesivas en canastos los frutos secos y las uvas desgranadas se hacían pasas colgadas como suicidas en el techo cebollas en hileras decoraban la cocina de campo se rinden las silabas de las palabras y parpadean las tardes entre los arboles hay flores llenas de rocíos que crecen al borde de las horas abril mojado tiritan y gotean las hojas manzanas asadas azucenas que acarician los portales juego con mi sombra y como ritual el otoño pronuncia despedidas se han amontonado millones de ocres hojas acaso la nostalgia amontonada se convierte en melancolía el sol jamas se dormirá en mi ventana esto es mi infancia intentare despabilar vientos para que retoñe el frió.
Terminada la vendimia descansan majestuosas las parras la humedad sobre las hojas las mantiene vivas envejecido otoño con versos y olor a campo setas blanquecinas aferradas a los troncos podridos los higos se secaron y las castañas huelen como mieles en los baúles viejos las bufandas de lanas aguardan las lluvias los días duermen en el absurdo gris de las nubes empapadas de nieblas es tiempo de libros viejos y mandarinas dulces de chimeneas humeantes y caminatas mi esencia y las melancolías miran con ojos y penas como se va la estación detrás de los cristales el viento estremece y susurran las cosechas en los galpones el trigo segado adormece junto a los zapallos verde-amarillos otoño en el campo con entrelazados recuerdos ausentes enmohecidos candados que guardan vasijas de vino yerbas secas olorosa miel y mis lirios ciegos escribiré en pausas para no perder el rumor de los otoños.
Concierto de otoño melodías de hojas que como pájaros perdidos se posan en mis ventanales como suspiros de colores y hay un manto de hojas rojas adagio del otoño y en las copas de los arboles se mueven las aves llenas de penas porque se mueren las hojas y se desnudan arboledas en los viejos adoquines se queda el frió deshilvanadas las ramas tiñen los estambres adormecidos es un abecedario de colores en donde se deletrean días el umbrío de las tardes acumula tristezas grises callados silencios donde son tan largos los otoños donde se entretejen montones de palabras arrullare los restos de sol que quedan de mayo el cuaderno del atardecer se tiñe de desánimo ha muerto el ultimo otoño junto a las magnolias.
Despojos de hojas que no tienen un después son un sentimiento que siempre se muda de estación arrugadas de tardes ocres y rojas besan rayos de sol mustias han de morir desnudas arrulladas en las melodías como maullidos se quejan los otoños nada puede tardar hoy cuando danzan como remolinos se quedan en los rincones de las arboledas preludio de sol y menbrillos hojas y días tranquilos el viento las despierta ellas murmullan sonidos de penas se perdonan al caer en el preámbulo de otoño tardes profundas mojadas horas antes de cambiar de color se resignan al equinoccio de la próxima estación.
Espigas y hojas secas me siento melancólica como el otoño juega el viento en mayo con las mariposas y el sol esta convaleciente en los pálidos días y sobre las calles y aceras esta el otoño del sur esperare las sedas del viento cayendo en mi pelo el otoño es un llanto de las estaciones tristes y el viento una sonrisa de los arboles con frió las hojas caen en versos de veranos que se han marchado todo esta distraido cuando huele a nostalgia es como una invitación silencios a la soledad antiguos retazos de estados anímicos almacenados recuerdos cuando se recogen los frutos mientras huyen inocentes las nubes son lluvias de las infancias y de setas casi rancias ramas desdibujadas y leña de hogar pensare en mi ultimo otoño cuando en los ventanales se amontonaban las ocres hojas viejas.
Y el viento se lleva las hojas de otoño acuarelas grises llegan otoños brotan los días y me acuno en un telar de palabras inventario de poemas y versos me arrepiento de no haberte pedido mas besos en nuestro otoño pasado se despide el viento de las rosas sin pétalos los crisantemos crecen en agosto y hasta los jardines llegan las hojas secas se abren mis parpados para ver el frió y la soledad de esta estación desahuciadas las tardes con arboles silenciosos campanas lejanas con ecos de olvidos suenan y el alboroto de los pájaros me despierta de la siesta posados en las viejas casas veo la pobreza de un otoño melancólico y mi pena se lleva los últimos gestos de las hojas amaran mis despedidas en los encuentros de breves horas.
Otoños poéticos de oscuras tonalidades tardes cortas viñedos tristes pobres hojas aniquiladas de frió las manzanas maduran en esta tarde de otoño retales de silencios que deshojan lilas enjambres de abejas todas las golondrinas saben cuando llega el mal tiempo también se mojan con la llorada lluvia silba el viento en las ventanas colores y suspiros tardes de soles tiernos y hojas ambarinas y se acarician las arrugas cuando se pasea silencioso por las hojarascas son tantos mis otoños que se posaron en mis cabellos y las lluvias se hicieron mis palabras no siempre mis retinas retienen los colores y en otoño los castaños dan su fruto se aferran los hongos y yo me aferro a los otoños en mis días de cenizas mañana también sera un día otoñal...
El otoño tiene lágrimas y ecos arrumbados un puñado de humo sobre los tejados solos el viento testifica que la ilusoria lluvia ya llegara hojas secas y rojizas bandadas de gorriones sonando como flautas mueren los olmos que descalzos de posan sobre hojarascas tristes nueces de inviernos letras que se duermen en capullos que descansan de las nostalgias otoñales aquí están pariendo mis versos en mi cielo ausente agonías purpuras estaciones grises de un adiós olvido suenan los grillos que nadie escucha ramas quebradas troncos y besos corazones incrustados de dos iniciales eso es otoño....
Languidece el día lleno de nubes tristes llora la tarde de otoño cuando todo es humedad en un alargado eco suenan las gotas sobre el tejado construí un huerto para ver como danza la lluvia sobre arboles y hojas amarillas intento construir bellos rincones para escribir sobre el terciopelo de la soledad de mi invierno la nada se quiere hacer escuchar para darme las razones de este otoño sin ti los versos intentan encontrarme un poco mas feliz el hinospito hielo de los errores se llena de moho nada es mas penoso que el intento de suicidio es así como se desea morir como cuando las hojas se aferran al ultimo abrazo del día como pájaros enloquecidos también caen las palabras.
Llenos de pájaros mis otoños se duermen con silencios grises se adormece una vida con fríos y bufandas de colores distraida ojeo un libro con hojas secas espero la lluvia que me hablara de los leños acabados junto a la estufa de invierno ayer cuando el día se despida frágil las hojas se caían danzarinas con la melodía del viento maravilloso espectáculo de emociones en mis tardes de otoños y en la hora de mi siesta enlazo recuerdos mirare con tristeza el manojo de las tempranas hortensias al fin llego la estación de las melancolías y versos cínicos los arboles se desvisten mientras los aguijonea la soledad en este regazo de la tarde mi animo merodea la ultima tristeza.